Uno de los problemas de salud importantes en nuestra sociedad es la Enfermedad Renal Crónica (ERC), pues está pasando de ser una enfermedad manejada por un especialista a un problema de salud pública.
La ERC se caracteriza por la pérdida progresiva de las funciones del riñón. Es decir, su capacidad de eliminar sustancias tóxicas, compuestos nitrogenados y ácidos orgánicos endógenos está limitada, así como el manejo de equilibrio hidrosalino y la regulación adecuada de la presión arterial. Asimismo, la disminución en la síntesis de Eritropoyetina tendrá como consecuencia una anemia progresiva en el paciente, y la falta de activación de la Vitamina D3 conllevará a alteraciones del metabolismo óseo mineral.
La ERC puede clasificarse en cinco estadíos que dependen de la Tasa de Filtración Glomerular (TFG), es decir, de la capacidad que tiene el riñón de depurar la creatinina.